Jessica Carrillo tuvo un bebé a los 17 años: “Nunca había hablado por temor a ser juzgada”
La conductora Jessica Carrillo se sometió a una terapia de regresión en plena transmisión de 'Al Rojo Vivo'
Jessica Carrillo tuvo un bebé en su adolescencia Crédito: Mezcalent
La copresentadora de ‘Al Rojo Vivo’ de Telemundo Jessica Carrillo reveló en vivo que tuvo un hijo a los 17 años de edad. Esta fuerte confesión la hizo al someterse a una terapia de regresión en su programa con la ayuda de la experta Damaris Chiari.
En la sesión, Jessica Carrillo estaba acostada y en medio de una meditación profunda. La terapista de vidas pasadas le hizo una serie de preguntas y la conductora respondió que en las imágenes que venían a su mente veía a su primer hijo.
“Mi hijo, mi otro hijo”, le respondió la periodista. La terapista continuó haciendo preguntas y le cuestionó si su hijo llegó a nacer, a lo que Jessica respondió que sí. “¿Lo ves frente a ti?”, continuó la terapista. “Sí, es hermoso y lo amo”, dijo Jessica visiblemente afectada.
¿Qué le ocurrió al bebé de Jessica Carrillo?
Luego de la sesión, conversó en el programa sobre aquel difícil momento que vivió hace 21 años. Jessica Carillo reveló que su hijo nació pero solo vivió un día ya que falleció debido a una rara enfermedad.
“En mi pasado tuve un hijo a los 17 años, mi Rodriguito, que solo vivió 1 día porque nació con una condición que se le presenta a 1 en cada 10 millones de niños, entonces solo pudo vivir un día. Nació un día después de mi cumpleaños y ha sido uno de los regalos más maravillosos que Dios me ha mandado”, dijo la periodista mientras era abrazada por su compañera Lourdes Stephen.
Jessica Carrillo afirmó que el dolor se ha mantenido con el paso de los años. “Han pasado estos 21 años, obviamente el dolor nunca se va, esa herida siempre está ahí, pero el hablarlo y el hacer estas regresiones te trae como un poco de paz al alma y gracias a él estoy aquí”.
La periodista aseguró que nunca habló de este doloroso episodio de su vida por temor a ser juzgada.
“Me siento tranquila de haber sacado ese dolor que traía acumulado en el pecho desde hace 21 años, que fue la pérdida de mi bebé. Es algo que nunca había hablado quizás por el qué dirán, por temor a ser juzgada, pero que siempre lo había sabido. Pero esta es una reconfirmación de que él llegó a mi vida por un día aunque sea como un regalo de Dios, como un préstamo de Dios y para abrirme el camino y llevarme al momento donde estoy ahora”.
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