Laura Zapata fue amenazada de muerte y teme por su vida
La hermana de Thalía pide justicia por su abuela en medio de amenazas de muerte
Laura Zapata se encuentra en el ojo del huracán. | Mezcalent
Después de una dura batalla que enfrentó Laura Zapata en contra del asilo donde se encontraba su abuela Eva Mange por negligencia médica, la actriz reveló que teme por su vida.
En entrevista con el matutino Hoy, la hermana de Thalía reveló que el vocero del Le Grand Senior Living no sólo ha hecho declaraciones en su contra, sino que la amenazo de muerte.
“Tengo una amenaza de daño físico por parte del vocero de este lugar del terror”, reveló la estrella de la pantalla chica.
Asimismo, dijo que la amenaza llega porque Ernesto Cisneros es “pareja sentimental de la dueña”, razón que lo ha llevado a tomar partido en esta lucha que no ha terminado.
Más allá de los dimes y diretes de Cisneros, lo que a Zapara la tiene muy angustiada son las amenazas de muerte que hay hacía su persona.
“Yo tengo miedo, imagínate, amenazada de muerte. Tengo miedo”, dijo.
Mas tarde, Laura Zapata denunció a través de sus redes sociales que su abuela había sufrido negligencia médica en el asilo donde se encontraba desde marzo de 2020.
La actriz compartió con sus seguidores una serie de imágenes que dejaban al descubierto las más de siete heridas escaras de decúbito que presenta en todo el cuerpo su abuelita.
La actriz no sólo empezó a ventilar a través de las redes el mal estado en el que se encontraba su abuela, sino que pidió ayuda a las autoridades mexicanas quienes acudieron al llamado de Laura Zapata y clausuraron el lugar.
Ante la movilización de la famosa, la cuidadora de Doña Eva reveló que su clienta llegó así al asilo, con heridas que no eran desconocidas por Laura.
En tanto, el vocero del asilo Ernesto Cisneros ha salido en diferentes programas de entretenimiento aclarando que es la actriz quien miente sobre la falta de atención a su abuela y junto con otros clientes preparan una demanda en su contra.
Hasta el momento el caso Eva Mange sigue en el ojo del huracán; entre dimes, diretes y demandas de por medio.
