Yolanda Andrade compartió adicciones con Julio César Chávez
Yolanda Andrade indicó que le gustaba mezclar whisky con cocaína
Yolanda Andrade | Mezcalent
La conductora mexicana Yolanda Andrade no ha dejado de ventilar sus momentos más duros a los medios de comunicación: su relación con Verónica Castro, su trabajo con Monserrat Oliver, su pelea con Daniella Navarro, entre otros aspectos. Ahora, en una entrevista con Isabel Lascurain en su programa de Youtube, develó las adicciones que llegó a compartir con Julio César Chávez.
La presentadora de televisión vivió un momento donde tenía vicios a las drogas, pero que pudo superarlo al internarse a tres clínicas de rehabilitación. “Yo era muy alcohólica, me tomaba dos botellas diarias de whisky o vodka y lo combinaba también con cocaína, que me encantaba”, reveló la artista.
Y en sus reuniones para hacerlo contaba con algunas compañías, lo hablaba con José José aunque nunca lo llegaron a materializar. Sin embargo, con el exboxeador Julio César Chávez si lo llevo a cabo. “Yo hablé con José José respecto a eso, qué bueno que nunca tomamos juntos porque imagínate. Con Julio sí, eran tres días encerrados en el baño con una bolsa de coca“, dijo.
Luego de cada victoria del deportista, se reunían en las fiestas donde abundaban estas sustancias. “Él terminaba una pelea y era el éxito rotundo, la locura, las felicitaciones, los artistas que llegaban a saludarlo. Me acuerdo perfecto que fueron Madonna a saludarlo y estaba Robert de Niro. Nos encerrábamos en el baño y ahí durábamos mucho tiempo, nos amanecía con una grabadora y escuchábamos a Mijares, Uno entre mil. Cómo la ponía hasta que se rayaba el disco, platicábamos como los borrachos que repiten lo mismo”, relató.
“Era una tristeza que quizá teníamos los dos, pero la única alegría que nos daba porque estábamos los dos encerrados en un baño y con una grabadora”, contó.
Asimismo, recordó cuando grababa ‘Netas divinas’ de Unicable, donde tuvo que ir a una clínica de rehabilitación. “Ya no nos daban vino tinto en el programa porque me tomaba el de todas las Netas Divinas y era un problema porque el llamado era a las 7 de la mañana y Joe ya se había tomado la botella. Una botella son cuatro copas y decía no es nada. Todos sufriendo” comentó.
Una vez bastante difícil donde también atacó contra ella misma, sino fuera por su hermana quien le quitó la pistola a tiempo. “Mi hermana me vio al momento que abrió la puerta del baño, y yo con la pistola en la boca, ya la había jalado y dije: ‘Ay, Dios Mío’. Fue lo último que vi, la imagen de mi hermana y estuvo muy duro”, narró.
