Kanye West cambia de número telefónico para no ser localizado por Kim Kardashian

Una de las parejas más queridas de la industria del entretenimiento sin duda era la que formaban el músico Kanye West y la reina del Reality Show, Kim Kardashian quien ahora atraviesan un proceso de divorcio muy tedioso donde, el rapero desea tener el mínimo de contacto con la también empresaria de moda y belleza, por lo que ha decidido dejar todo en manos de sus abogados y asistentes quienes incluso toman las llamadas de la morena pues cada que West contesta el teléfono éste padece una crisis nerviosa.

Resulta que desde finales de noviembre del año pasado las cosas no andaban bien entre la pareja, por lo que la retirada de West hacia su rancho y la búsqueda de confort en su grupo religioso ha sido lo único que le ha dado consuelo al músico originario de Atlanta Georgia, ya que el temperamento controlador de su suegra y la forma imperativa de Kim es lo que habrían agotado mentalmente al cantante, que padece bipolaridad, enfermedad que puso muchas veces en riesgo la estabilidad de su matrimonio, y por lo cual aseguran fue una factor determinante de Kardashian para acabar con su matrimonio asegura una fuente cercana a la aún pareja al portal Page Six.

Por lo que el siguiente paso para Kanye fue cortar toda comunicación con la socialité, al grado de que cambió su número telefónico personal, dejando sólo el de sus asistentes como único medio para localizarlo. No obstante Kim, está tomando una actitud diferente, pues ella le permite ver a sus cuatro hijos en común, North, Chicago, Pslam y Saint y comunicarse con ella cuando lo necesite, ya que ella es consciente de la fragilidad de su aún esposo.

“Kanye los ama y los está viendo muy seguido. Ella sale de la casa y él llega y pasa tiempo con los chicos. Tienen un ejército de niñeras, lo que facilita la transición”, confirmó el diario Daily Mail. 

La también modelo habría accedido a que su ex esposo pase todo el tiempo que desee con sus cuatro hijos, e incluso, para evitar algún problema, también aceptó su condición de que ella no esté presente en las visitas.

Hasta ahora se desconocen los términos de su divorcio, y aun falta saber cómo se repartirán la fortuna de 2 mil 600 millones de dólares que amasaron desde que se casaron en 2014.