¿Acaso es sólo un truco de publicidad? Michelle Renaud habla sobre los mensajes que la gente le ha hecho llegar tras ruptura con Danilo Carrera
Desde hace unos días, toda la gente fanática del mundo de las telenovelas en Estados Unidos y América Latina se lamentaba por el anuncio de una de las parejas más populares del medio, la que conformaban la bella actriz mexicana Michelle Renaud y el actor ecuatoriano Danilo Carrera, mismos que casualmente, terminaron justo cuando están protagonizando la telenovela del horario de las 3:30 de la tarde en la programación de Televisa, titulada ‘Quererlo Todo’.
Extraño ¿no es así?, porque se supondría que el hecho de que tengan que revivir esa flama del amor que en la vida real llevaban, haría todo el tema de la química un poco más sencillo. Pero por el contrario, se dejaron.
Es un poco raro, porque se ha manejado la versión de que Scarlet Gruber, venezolana con papel de villana y pareja inicialmente del papel de Danilo Carrera, fue la tercera en discordia y que según los chismes baratos, colocaban como la culpable de la separación.
Pero la misma actriz, enojada, salió a desmentir la información.
Entonces ¿qué es lo que pasó?
Bueno, luego de que la misma Renaud publicara en sus historias de Instagram los supuestos mensajes que le estaban llegando por parte de los fans, estos siguen reforzando la idea de que todo podría estar tratándose de un truco para subir la expectativa y que la audiencia se concentre aún más en la telenovela.
Desde aquel anuncio, la telenovela junto con sus actores del elenco han sido trending entre la prensa rosa.
Una cuenta de Instagram particular tomo capturas de las mismas:
Además, si analizamos el discurso que utilizó Michelle, no suena exactamente como un motivo de infidelidad o problemas reales de pareja, porque también en el post, menciona el nombre de la telenovela, como la famosa técnica publicitaria del Product Placement… ¿o ustedes que piensan amigos de La Vibra?
Extraño, bastante extraño, al menos basándonos en el dicho popular, diría que por el contrario, aquí: ‘no ha salido el peine.’