La hermana de Chiquis Rivera, Jenicka López, se sometió a cuatro cirugías estéticas en un día
La hermana de Chiquis Rivera, Jenicka López, entró al quirófano para someterse a varías cirugías estéticas el mismo día
Jenicka Rivera, hija de Jenni Rivera Crédito: Mezcalent
Jenicka López, la hermana de Chiquis Rivera, entró al quirófano para someterse a una serie de cirugías estéticas.
La hija de la Diva de la Banda, Jenni Rivera, ha estado durante dos años trabajando fuertemente en su cuerpo, dedicándose a rutinas de ejercicio y una vida saludable para perder aproximadamente 60 libras. El ejercicio y la buena alimentación fue lo primordial durante todo el proceso y la última fase de su transformación sería a través de las cirugías estéticas.
Jenicka explicó en un video que publicó en su canal de Youtube que se ejercitaba bastante pero con eso no lograba tonificar o eliminar los excesos de piel. Por eso sus procedimientos estéticos estuvieron enfocados en eliminar gran parte de la piel que le sobraba producto de la pérdida de peso.
El 19 de abril la joven influencer entró al quirófano para someterse a cirugías. En total fueron cuatro las intervenciones que se hizo Jenicka en su cuerpo en un solo día. Ella se hizo una abdominoplastía, una braquioplastia para conseguir unos brazos más tersos, una liposucción para eliminar los pliegues de la espalda y un lifting brasileño, que consiste en extraer grasa de otras zonas del cuerpo para inyectarla en los glúteos.
“He trabajado muy duro para perder tanto peso como pudiera y poder llegar a este punto”, asegura Jecnicka quien destaca que después de tanto ejercicio, la cirugía estética es la etapa final.
Su hermana, la famosa cantante Chiquis Rivera estuvo apoyando a su hermana en todo momento e incluso durante el postoperatorio. A Chiquis no le importó que dos días después de que a su hermana le dieron de alta tenía que presentarse en los American Music Awards en Las Vegas.
A pesar de sus compromisos profesionales, Chiquis cocinó para su hermana menor durante el postoperatorio, controló su medicación e incluso la ayudó a ir al baño. Incluso, contrató a un peluquero para que acudiera a casa a lavarle el pelo y eso la ayudara anímicamente.
