Carlos Bonavides confiesa que por el abuso de las drogas vio al mismísimo diablo
El famoso actor del "Premio Mayor" reveló que tuvo un momento crucial en su vida que lo llevó a tocar fondo y al final dejar las adicciones a un lado
El famoso “Huicho Domínguez” sigue siendo uno de los personajes más queridos en la televisión mexicana, pues la telenovela del “Premio Mayor” fue un antes y un después para las telenovelas así como para el actor, Carlos Bonavides.
En una sincera charla que mantuvo con Jorge “Burro” Van Rankin, Bonavides abrió su corazón y reveló sus excesos, así como lo que le dio y le quitó dicho personaje en la vida real.
Fue precisamente durante esta conversación que narró los duros momentos que vivió luego de ser reconocido por su personaje de Huicho Domínguez y de caer en el mundo de las drogas.
Durante esta conversación el famoso confesó que empezó a tomar a los 19, además de que probó los hongos, al peyote y a pesar de que le gustó, siguió con el alcohol y las drogas no sólo naturales.
Además durante esta entrevista narró que el vivió un delírium trémens (por abstinencia de alcohol), donde tuvo diversas visiones. Pese a la mala experiencia que vivió, Carlos aseguró que ni eso lo pudo detener de seguir con sus adicciones.
Tenía una abstinencia de tres días de alcohol, esa botella yo la traía y por fuerza de voluntad duré 4 días sin tomar, pero ya no podía y ¡pum!, le llegué, entonces me vi muy grave, y tan grave me vi que salí de la clínica a tomar y a drogarme"
En suma, el artista de 80 años relató algunos detalles de las alucinaciones que padeció por su adicción, entre estas tenía paranoia, delírium trémens, persecuciones.
Un día unos perros me persiguieron, me salté una barda y yo salvé la botella que llevaba y se me apareció el diablo y me dijo ‘órale, tómale’, y yo con miedo me la tomé"
EL PERSONAJE DE HUICHO DOMÍNGUEZ LO SUPERÓ POR MUCHO
Posteriormente, Carlos admitió que el personaje de Huicho lo rebasó completamente, pues lo llevó a lo más alto del éxito en las telenovelas, pero esta situación no la supo manejar y cayó en los excesos.
Me iba yo vestido de Huicho Domínguez a Garibaldi, a tomar de mesa en mesa. ¡No te imaginas!, sí, me traspasó, tomaba todo el tiempo, gané, muchísimo dinero, me compré una casa en Cancún, dos motocicletas de marca, tenía un pequeño yate, o sea, si gocé, Las Vegas…"
En suma, reveló que gracias a sus vicios perdió todo el dinero que ganó con su famoso personaje. “Nada, todo me lo metí, casas, carros, todo, desapareció. Consumía cocaína y me inyectaba heroína”.